domingo, 8 de noviembre de 2015

Como educar a un cachorro

Quizás la sesión de adiestramiento que denominamos de "educación temprana", en la que visitamos el domicilio de un nuevo e ilusionado propietario de un cachorro, es la que más satisfacción nos produce debido a su alta eficacia. Cuando el cachorro llega a casa todavía estamos a tiempo de todo (el comportamiento de un perro está condicionado en un 40% por su genética y en un 60% por su educación).....y si conseguimos ser persuasivos y convencer al cliente para que siga nuestras pautas, al final obtendrá el perro con el que sueña y con el que disfrutará largos años.

Y es que si hacemos las cosas bien desde el principio, todo es mucho más sencillo.

Pero las pautas que damos para la educación del cachorro, necesariamente han de adaptarse a distintas variables:

  • variables del perro: raza, temperamento, tipo de crianza que tiene, tamaño.........
  • variables del ambiente: piso o parcela, tiempo disponible para paseos, lugares de paseo......
  • variables del dueño: objetivos (compañía, agility, canicross....), temperamento del dueño, conocimientos y experiencia del dueño.......


En función de todas estas variables las pautas serán unas u otras. Por ejemplo, cuando la ONCE deja uno de sus futuros perros guía en manos de una familia durante el primer año, les indica en las pautas la prohibición de usar pelotas para jugar........debido a que, en un perro guía, interesa tener inhibido el instinto de caza o persecución hacia objetos en movimiento.......

Por lo tanto, sin ánimo de dar pautas concretas, hacemos un breve repaso sobre los temas que tratamos en estas sesiones de educación temprana para cachorros, y que desarrollamos a lo largo de las dos horas de visita:

  • Socialización: se refiere a la habituación del cachorro a los distintos estímulos que se va a encontrar en su devenir diario.....haciendo especial hincapie en la socialización con otros perros y con personas extrañas y niños (principales detonantes del miedo agresivo en el perro adulto). Esta habituación debe adaptarse al tipo de perro, puesto que, por ejemplo, ir con un cachorro a la puerta de un colegio para rodearse de niños ávidos por tocar al pequeñajo puede ser una buena idea o una pésima idea (dependerá del temperamento y sensibilidad del cachorro).......por lo tanto, la socialización a de hacerse con cabeza si no queremos conseguir el efecto contrario (que el perro se sensibilice y adquiera miedos irreversibles en el futuro). 
  • Conducta higiénica.......uno de los problemas que más acucian a algunos dueños, y una de las cosas que menor importancia tienen si se enfoca de manera adecuada. Aquí lo que influirá mucho será el tipo de ambiente y la disponibilidad en tiempo del propietario.......haremos una entrada específica sobre este tema. 
  • Juego......¿es bueno jugar?: para responder esta pregunta primero hay que saber el tipo de objetivo que buscamos con el perro......en cualquier caso, el juego siempre ha de ser reglado. El juego es importante en los animales sociales porque es el lugar donde ensayan conductas, relaciones, pautas sociales.......en el juego el perro sacará conclusiones sobre la relación con su dueño......y es importante además que el perro juegue "con cabeza" o pensando.....porque el juego mal entendido puedo provocar en el perro nerviosismo, excitación, ansiedad.......Por lo tanto.....mejor no jugar que jugar de mala manera. 
  • Ansiedad por separación......uno de los problemas que más consultas generan para el profesional.....y que es muy sencillo prevenir a edad temprana. Tan solo tendrás que generar en tu cachorro sentimientos de autonomía y no de dependencia.......evitando las conductas dependientes (como seguirnos a todas partes) y reforzando las conductas más autónomas (como permanecer tumbado aunque salgamos de la habitación). 
  • Correcciones y comunicación: el cachorro va a tratar por todos los medios de entendernos y de integrarse en el nuevo núcleo social al que ha llegado. Si somos conscientes de este hecho y tratamos de ponerle las cosas fáciles (siendo claros), todo fluirá e irá cubriendo sus etapas de desarrollo sin mayores problemas. Para empezar: deberemos tratar de establecer un código de comunicación con el perro que usará toda la familia. Son cuatro palabras (que no me detengo a explicar aquí porque sería largo y lioso sin poder verlo en la práctica.......pero que tratarán de informar al perro de cuando lo hace bien, de cuando lo hace mal pero no estamos enfadados, y de cuando lo hace mal e implica nuestro enfado). Y también deberemos aprender cuando y como se puede corregir a un cachorro...
  • Enseñanza de acciones.......como el sentado, el tumbado, el junto.........esto es totalmente irrelevante con el cachorro (incluso diría que contraproducente, por muy común que sea que empecemos a enseñar al cachorro a dar la pata casi desde el primer día que llega a casa). Aunque si enseñamos desde el principio la llamada (la orden más importante en el perro y que nosotros desarrollamos a lo largo del primer año, para conseguir un perro adulto con una llamada muy segura). Es muy importante trabajar sobre lo que pasa en la cabeza del perro. Comenzar a pedir cosas al cachorro ofreciendo un pedazo de salchicha puede conseguir resultados aparentes (el perro se sienta, viene, da la pata....), pero lo hace ha cambio de un premio que le ofrecemos. En realidad estamos construyendo un tipo de relación social basada en el premio (una especie de soborno).....a la larga el perro joven empezará a valorar cosas que le ofrece el ambiente (olores, otros perros, gatos....) y dejará de obedecer a un "pobre" dueño con un trozo de salchicha en la mano.....("total.....todos los días me dan de comer"...pensará el perro). No digo que no haya que usar refuerzos.....sino que deben usarse con moderación y conocimiento....y que el perro, finalmente, debe obedecer como parte de la integración en su grupo social, como muestra de respeto y confianza con su dueño......y todo esto es un proceso que se consigue en la interacción diaria con el cachorro. .
  • Conducta higiénica: Siempre me ha llamado la atención la cantidad de gente que nos llama motivada por esta cuestión........porque la verdad es que debería ser lo de menos.....solo con un poco de paciencia y comprensión, la mayoría de perros en poco tiempo están haciendo sus cosas en la calle........en cambio, aquellos dueños que se empeñan en corregir, regañar por ensuciar....etc, convierten lo natural en problema.....a veces complicado de corregir. 

 Resumiendo......en esta fase el perro tiene mucho que aprender........debe aprender que es un perro con identidad propia, con un lenguaje específico necesario para comunicarse con los de su especie, con unas características de adaptación únicas que le permiten integrarse en grupos sociales interespece, debe aprender a entendernos, que tipos de comportamiento son admisibles en el grupo social que le acoge y cuales no, debe aprender a gestionar sus emociones (autoregularse para no abalanzarse sobre las visitas cuando lo embarga la alegría, o para no agredir a otro perro cuando lo domina el miedo)........en fin.....tiene mucho desarrollo por delante y nosotros tenemos que poner las condiciones para que este desarrollo se vaya produciendo de manera adecuada.

Juan Carlos Aparicio

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